El diagnóstico de la roncopatí­a es sencillo, ya que es el mismo paciente o su acompañante quien, al ir a la consulta, nos lo refiere. Sin embargo, debemos de precisar el grado de roncopatí­a, ya que evidentemente la roncopatí­a leve no es la misma que la moderada, o que la severa, o la muy severa. Saber si el paciente es roncador con la boca abierta o cerrada, si hay factores posicionales, si está en relación con la ingesta de medicamentos o alcohol, etc., nos será de una gran ayuda para su clasificación. Pero la poligrafí­a respiratoria, con el análisis de los ronquidos, será el estudio aconsejado en las roncopatías importantes, ya que es la única prueba que nos indicará exactamente el porcentaje de tiempo que el paciente está roncando por la noche y su relación con las determinadas posiciones que adopta durante el sueño, o su relación con las apneas o movimientos torácico-abdominales. A veces, el paciente no sabe a qué médico acudir cuando padece de roncopatí­a, y es el médico generalista quien lo enví­a al otorrinolaringólogo para despistaje de problemas de nuestra especialidad. El otorrinolaringólogo debería ser, dado nuestro conocimiento en estas áreas, el primer especialista a quien se visite.

Protocolo del especialista:

  • Anamnesis completa: Comprobación de todos los datos clí­nicos que constituyen el historial médico del paciente
  • Exploración endoscópica: Ha de realizarse una exploración endoscópica completa del área endonasal, rinofarí­ngea, farí­ngea, hipofarí­ngea y larí­ngea
  • Estudio rhinomanométrico: Ha de realizarse un estudio rhinomanométrico de la ventilación nasal, a fin de determinar de una manera objetiva los flujos, la resistencia y las presiones nasales
  • Estudio poligráfico: Estudio poligráfico respiratorio nocturno
  • Interconsultas: Realización de interconsultas con otros especialistas, como endocrinólogo, neumólogo, psiquiatra u odontólogo cuando observemos patologí­as asociadas
  • Estudio poligráfico+posición: Estudio de poligrafí­a respiratoria nocturna con determinación y cuantificación de ronquidos en su relación con la posición corporal del paciente